Escribir poesía, en este mundo globalizado en el que estamos inmersos, es caminar en busca de esa sensibilidad que nos permite definir ciertas experiencias nacidas del dolor y del sentimiento, interactuando con la Palabra que se pierde en el interior de cada uno hasta fundirse con la propia esencia. Escribir poesía es ser capaces de descubrir ese silencio redimido por un lenguaje siempre cómplice.
Posiblemente, escribir poesía sea escapar, al menos con el pensamiento, a ese lugar secreto que todo poeta posee, y desde allí observar el mundo que nos envuelve y reflexionar sobre la vida para poder, quizás, despertar en el absurdo.
No obstante, escribir poesía es también encontramos ante la triste paradoja de constatar que, aún con las dificultades que encierra el hecho de publicar, los poetas todavía continúen en el panorama literario valenciano intentando escribir, difundir su poesía y, en la mayoría de los casos, innovar.
No podemos hablar de la poesía en Valencia sin tener en cuenta sus antecedentes históricos: los escritores que fundamentaron su quehacer literario con la mirada puesta en el mundo de los clásicos y que desde allí avanzaron hacia nuestro tiempo.
Así pues, hablar de poesía en Valencia es mirar de frente a las generaciones que nos precedieron, situarse muy cerca de los poetas que surgieron durante los años de posguerra, poetas que conforman el espejo donde se miran los poetas recientes.
Poetas como Vicente Gaos, Juan Gil-Albert, Francisco Brines o César Simón han sido y continúan siendo el vínculo perfecto que les ata a otras épocas.
La poesía de los años 70-80
A partir de los años 70 y después del giro poético que supuso la Antología de Castellet “Los nueve novísimos españoles” –en la que se incluía a Guillermo Carnero y Vicente Molina Foix, pero sin reconocer a nombres tan importantes dentro de la poesía valenciana como son Jaime Siles y Ricardo Bellveser- la concepción de la poesía española experimentó un profundo cambio, al igual que la valenciana.
La novedad de la obra de Castellet fue establecer un claro distanciamiento respecto a la poesía anterior. Realmente, la estética de los novísimos marcaba un antes y un después y, si se quiere, un distanciamiento notable con respecto a poéticas anteriores, abriendo caminos de gran interés para la investigación literaria.
No tardaron en hacer su aparición magníficos poetas con aires de renovación que presentaban sus poemas desde estéticas diversas con la intención de dar a conocer su propia obra. Poetas que a lo largo de los años 70-80 comenzaron a consolidarse y que con el tiempo se han convertido en referente perfecto para los poetas recientes.
De este modo, Valencia fue testigo de una interesante actividad cultural. Nuevas Antologías Literarias hicieron su aparición, antologías nacidas en el seno de las asociaciones de escritores, las cuales crearon nuevos cauces de divulgación de la poesía valenciana por medio de sus revistas.
Dentro de la nómina de poetas que con fervientes deseos de abrir nuevos caminos a la poesía comenzaron a publicar durante los años 70, hay que destacar a poetas como Jaime Siles, quien ya había publicado durante los últimos años de 1960. A Siles siguieron Ricardo Bellveser, Miguel Más, Alfonso López Gradolí, Pedro J. de la Peña, Jenaro Talens, Mª Teresa Espasa y un largo etc.
Hemos de afirmar por tanto que las generaciones de los años 70-80 marcaron un hito dentro de la poesía valenciana, grandes poetas que bien podían llenar los anaqueles de las librerías especializadas.
Así pues, la década de los años 80 constituyó la consolidación de aquellos poetas que comenzaron a publicar en los años 70. Sin ninguna excepción, todos ellos continuaron buscando un nuevo lenguaje para su expresión poética.
Estos escritores, convertidos en maestros, tenían tras de sí a varios grupos de jóvenes que intentaban seguir el camino marcado por los poetas que tanto admiraban.
Poetas de la generación de los años 80-90
Hacia la mitad de los años 80, los jóvenes aspirantes a poetas, bien formados académicamente, fueron reagrupándose en torno a diversas Asociaciones de Escritores ya existentes, cuyo soporte de expresión y divulgación poética, como ya se ha dicho, eran sus propias revistas literarias que, si bien hoy han desaparecido debido a la poca o nula ayuda que la cultura valenciana recibe de los órganos administrativos, en su momento formaron una plataforma importante donde las generaciones de poetas de los años posteriores pudieran enraizarse.
De esta manera fue surgiendo una nueva generación de escritores, la de los años 80-90. Poetas que a su vez se han convertido en referente necesario para las nuevas generaciones de escritores valencianos. Hay que hacer notar que, tanto las antiguas Asociaciones Literarias como los poetas aglutinados a su alrededor, buscaron nuevos métodos así como estéticas más acordes a sus intereses.
La última parte de la década de 1980 y los primeros años de los 90, se caracterizaron, al menos en parte, por una poesía muchas veces controvertida. Las influencias venían de todas partes: el lenguaje beat americano, la insumisión, el surrealismo, el realismo sucio, las noches de Blues…
De cualquier modo, la tradición clásica, marcaba el lirismo más puro y absoluto. Explosiva mezcla que hizo reflexionar a propios y extraños.
Como representantes de la generación de los años 80 quisiera citar a los poetas siguientes: Uberto Stábile, José Mª Izquierdo, Miguel Romaguera Antonio Cabrera, José Miguel Arnal, Fernándo Garcín, Rafael Camarasa, Miguel Argaya, Rafael Coloma,Vicente Gallego, Juan Pablo Zapater, Carlos Marzal, José Luis Martínez, etc.
La trayectoria poética de los poetas mencionados ha sido y continua siendo decididamente imparable, su prestigio es reconocido por todas partes. Aunque bien es cierto que sería necesario un estudio completo de estos poetas.
En un segundo momento, ya dentro de la década de los 90, comenzaron a publicar su obra Elena Torres, Javier Piñol, Mar Busquets, Sergio Arlándis, etc. Todos ellos con un camino ascendente que debe tenerse en cuenta.
Es cierto que la poesía sigue reflejando la vida, el acontecer diario permanece inmutable. Los poetas siguen utilizando un lenguaje más o menos cotidiano, sin dejar por eso la tradición clásica.
Quizá lo más interesante del momento sea observar la evolución y la dinámica del poeta que no cesa en su investigación lingüística
Una mirada al futuro
Después de un tiempo de relativa calma en cuanto al asociacionismo valenciano se refiere, en los últimos cuatro o cinco años una nueva explosión, un nuevo resurgir de Asociaciones Literarias, se ha manifestado dentro de los ambientes culturales.
Igual que ocurrió en tiempos pasados, alrededor de los colectivos de escritores se concentran nuevos poetas con deseos de dar a conocer sus trabajos. Poemas diferentes, con características propias imprimen distintos valores a la poesía, haciéndola realmente interesante.
En la actualidad existen más de treinta asociaciones de escritores dentro del panorama literario y poético de Valencia, todas ellas apreciables, excelentes la mayoría, asociaciones que aportarán gran prestigio, en lo que se refiere al avance poético, en un futuro no muy lejano.
Para concluir, debemos decir que el debate acerca de la poesía valenciana sigue abierto. A nosotros nos interesa sobre todo la poesía, su evolución, el poder de su palabra y su silencio. Estamos junto a esa poesía sometida a una vorágine de contrastes y cambios que la hacen avanzar y retroceder al ritmo de la historia, de la vida misma.
La poesía del futuro, la que ya atraviesa el páramo hacia lo que llamamos futuro, será -estoy convencida de ello- , aquella que trate de investigar nuevas formas.
Lenguaje y contenido, o si se quiere fondo y forma, deben crear esa realidad insoslayable que hoy en día nos envuelve.
Seis poetas valencianos
Somos conscientes de que en la presente selección renunciamos a un gran número de poetas verdaderamente interesantes. No obstante, hemos querido comenzar el presente artículo con una introducción que, de alguna manera, nos indique el estado actual de la poesía en Valencia.
Teniendo en cuenta que nuestra intención es retomar en otro momento esta amplia e imparable nómina de autores valencianos, con miras a realizar una antología en toda la extensión de la palabra, en estos momentos y gracias a la petición formulada por la Revista IMÁN hemos seleccionado a seis poetas, todos ellos nacidos en Valencia.
Sea como fuere, los poetas valencianos en los que hemos centrado nuestro interés son aquellos que comenzaron a publicar en la década de 1970 a 1980. Poetas que, con algunas interrupciones, han continuado editando su obra hasta llegar a nuestros días. Seis poetas que, si bien es cierto mantienen una diferencia sustancial en cuanto a su estética, también es cierto que su obra les hace imprescindibles a la hora de considerar la poesía valenciana actual.
Así pues, en la presente selección hemos reunidos a seis poetas de edad comprendida en una estrecha horquilla, en la que de unos a otros apenas hay una diferencia de siete años. Los que van de Blas Muñoz Pizarro a Jaime Siles, pasando por Rafael Soler, Mª Teresa Espasa y Ricardo Bellveser. La excepción en cuanto a edad es Antonio Porpetta, que comenzó a editar en los años 80, década en la que dio a la imprenta siete de sus primeros libros de poesía.
Aunque es cierto que no todos nuestros autores comparten la misma estética, también es cierto que todos ellos comparten una calidad literaria ciertamente reconocida. Lo que sí se ha intentado abiertamente es que las obras de nuestros autores representen diferentes estilos y que se hayan significado en el impulso de innovadoras iniciativas literarias, a fin de dar más riqueza a la selección.
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