Plegaria del joven dormido
“¿o no tienen respuesta mis palabras de suicida recién nacido?”
Yo nací muerto.
Nací el día de San Ramón Nonato, 31 de Agosto.
Entre guirnaldas y nuevos propósitos… que nunca tenían respuestas.
Y yo muerto… en vida… un muerto que no para de vivir…
¿No es acaso la mejor manera de vivir?
Sin dudas, sin miedos, sin anhelos… y sin respuestas… para qué… si estoy muerto.
Y al desvelar mi tiempo
de sombras y lutos
alimento vanos pensamientos
para curar mi dolor, que en el cruento péndulo
de la rueda de la fortuna se encontró otros muertos…
Muertos gritando ¡injusticia! Y vivos callados como muertos.
Hay salvadores bajo palio,
de lunas y cruces apropiados, desalmados, aclamados…
¿No hay hombres vivos?… No hay dioses… ni sueños. Solo muerte y mierda.
Es decir… vida… cuando se mezcle con esta pertinaz lluvia.
Javier Picazo