Crearé un sendero de pétalos blancos y
rosas, pétalos de eternidad para ti, para
que llegues al final del valle, impregnada
de aroma de luna.
Crearé un valle con velas encendidas con
la llama de almas abiertas a la conciencia
de amor y entrega, para que llegues al
final de la pradera, impregnada de aroma
a manzana.
Crearé una pradera con elixires de
ofrendas antiquísimas de hadas que
pululan cual guías espirituales de almas
inocentes, para que al final del cerro
encuentres el árbol de la vida, impregnada
con aroma de albahaca.
Crearé una arboleda para que camines
entre árboles impregnados de luz verde
esmeralda y cuando llegues al último árbol
te encuentres en tu añorado hogar y
puedas sentir la paz de un merecido
descanso, con aroma de lluvia y nube de
algodón y cristales bajo tu regazo.
Será entonces, cuando a vista de pájaro
podrás contemplar la belleza del camino
que creé para ti y sólo entonces, me verás
como un punto diminuto, levantarás tu
mano y me dirás, hasta pronto, y sólo
entonces yo, podré encontrar mi descanso
en cualquier rincón de esta tierra donde tú,
madre, me viste nacer.
Sarilis Montoro
Muy de dentro ,me gusto mucho