Samuel Vásquez
Medellín, 1949. Poeta, dramaturgo, ensayista, músico, artista plástico. Cofundador y curador de la Bienal de Arte de Medellín. Comisario de la Bienal de Montevideo, Uruguay. Fundador y director del Taller de Artes de Medellín, que congrega teatro, música, danza, literatura y artes plásticas. Sus obras de teatro han sido escenificadas por grupos de España, Venezuela y Cuba, así como algunos grupos colombianos. Dirigió 17 obras teatrales y ha participado como miembro del Comité Organizador del Festival Internacional de Poesía de Medellín. Es, además, cofundador de la revista Prometeo del mencionado Festival. Poemas y ensayos suyos aparecen en libros y revistas del país y del exterior. Su poesía ha sido traducida al rumano, portugués, francés e inglés.
ESTO NO ES UN POEMA
TIENE FRÍO EL SUEÑO. Tiene sueño la impaciencia.
Tiene impaciencia el deseo. Tiene deseo el recuerdo.
Tiene recuerdo el miedo. Tiene miedo la rabia. Tiene rabia
el hambre. Tiene hambre el vacío. Tiene vacío la impotencia.
Tiene impotencia la verdad. Tiene verdad el silencio. Tiene
silencio la justicia. Tiene justicia la noche
y sólo la noche:
¿No será que cultivamos la niebla?
Arthur Rimbaud
COMO PERROS SATISFECHOS esconden los huesos
entre la tierra árida. Madres enloquecidas de amor, la cal
en su corazón, abrazan fémures ajenos. No hay luz en las
cosas ni por encima de ellas, y lo que ayer era exacto no
encuentra ahora una forma mansa donde posarse. Del terror
de la noche guarda la mañana, solamente, sus tenis blancos.
Entre escombros la muerte nos da en adopción a sus hijos.
La piedra arde en palabras insondables. Hay orgías en la
cárcel y ataúdes mordidos por termitas entre las madres de
la Candelaria. El dolor es la única brisa de la acacia.
SEGOVIA, 11 de noviembre de 1988
Mirarás un país turbio entre mis ojos
Aurelio Arturo
ALBA TARDÍA DE GALLOS ASESINADOS. Las puertas
que no entraron es sus casas han huido. La lluvia esmerila
la mañana con su lija helada. Un disparo triza la pizarra que
aún no aprende. Detrás de la nada hay una respiración. No
a la vista de todos: en el envés de la piedra una rúnica muda
es la prueba. Al hacerme víctima y testigo invalidan mi
palabra. Infame el acto que hace miserable el recuerdo.
En el sueño del mundo clava la noche sus cuchillos.